
Volkswagen Sigue utilizando tracción delantera (FWD) en muchos de sus vehículos debido a una combinación de practicidad, eficiencia y rentabilidad. Las configuraciones FWD suelen ser más eficientes en cuanto al espacio, ya que el motor y la transmisión están montados juntos en la parte delantera, lo que libera espacio en la cabina y la carga. Esto hace que la FWD sea especialmente atractiva para autos compactos y medianos, segmentos en los que Volkswagen tradicionalmente ha destacado, como el Golf, el Jetta y el Passat.
Desde una perspectiva de ingeniería, los vehículos con tracción delantera (FWD) suelen ser más ligeros y ofrecen un mejor ahorro de combustible que las alternativas de tracción trasera, lo que los hace atractivos para los conductores habituales. También se desempeñan bien en condiciones climáticas adversas como la lluvia o la nieve, proporcionando mayor tracción, ya que el peso del motor recae sobre las ruedas motrices. Esto es especialmente beneficioso en los mercados de Europa y Norteamérica, donde estas condiciones son comunes.
Además, mantener la tracción delantera ayuda a Volkswagen a mantener la asequibilidad y optimizar la producción, ya que requiere menos componentes en comparación con los sistemas de tracción total o trasera. Si bien la marca ofrece tracción total en modelos de alto rendimiento y SUV como el Golf R o el Tiguan, la tracción delantera sigue siendo una opción inteligente para la mayor parte de su gama, satisfaciendo las necesidades del conductor promedio sin comprometer la fiabilidad ni la maniobrabilidad.